48. He aquí Jesús, a tu puerta está
1.
He aquí Jesús a tu puerta está,
a la puerta de tu corazón;
no le dejes ir sin tu puerta abrir,
si deseas la salvación.
Pues, abre… abre…
Deja al Salvador entrar;
Y por siempre jamás feliz serás
si dejares a Cristo entrar.